Increíble luminosidad
Una
hermosa melodía rodea esa tarde de castaños, de castaños y olmos que despiden
lazos de sol entre sus hojas, lazos de luz en una tarde animada por trompetas y
trombones, tambores y platillos, y un escritor. Un tonto que creía que aquel
paisaje podría quedar simplificado a negros y blancos, a líneas y curvas, a una
hermosa melodía de trombones y castaños a íes, oes y aes y lazos de luz, lazos
de sol, de letras y de amor. Un tonto, sin más, simplemente un tonto iluminado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario